
Soy el silencio que flota sobre el viento frío. Soy el que busca. Soy la simple materialización de los sentidos, todos en uno, y te percibo. Soy esa sensación de calor que te llena en sueños. Soy el cosquilléo que te invade en el instante previo. Soy la leve vibración del aire que precede a ese gemido ahogado que depositas en tu almohada.
Te rodéo, te observo, te estimúlo y te lleno aun sin tocar siquiera un mechón de tu pelo, sabes que estoy allí, que floto, que vuelo en torno a ti. Sabes que soy y aunque no me veas estoy.
3 comentarios:
A veces no hace falta tener al lado a alguien físicamente, para notar su calor, su olor , sus caricias, incluso su cuerpo junto al nuestro, sabiendo que esta ahí para todos los momentos en que lo necesitamos, y como tu dices esa sensación es inevitable y inexplicable, pero también nos relaja y gusta tenerla.
Besos.
Lunna.
eres el perfecto amante
suerte tiene la que amas...
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